Refrigerante anticongelante y anticorrosivo Tipo A para Motores Diesel y Nafteros.
Características:
Normativa:
El Glicial Ecoflú se elabora bajo procedimientos de calidad estandarizados según basados en las siguientes Normas Vigentes: IRAM, IRAM 41368:2008, SAE J 1034 ASTM D 4985 y ASTM D 3306 entre otras normas propietarias de fabricantes de Vehículos. Así mismo, cumple con la resolución 237/2008 de la Secretaría de Comercio Interior.
Recomendaciones:
Uno de los requisitos más importantes para que un motor de combustión interna (nafta, diesel o gas natural) pueda alcanzar los límites de trabajo previstos, se refiere al enfriamiento del motor y más específicamente a mantener la temperatura del mismo en las condiciones de diseño en forma constante en el tiempo.
Para tener una idea completa acerca de la importancia de mantener la temperatura del motor dentro de sus límites establecidos, debemos recordar que, por ejemplo, en un motor diesel solamente entre el 35 % y el 40% de la energía producida por el combustible se transforma en potencia. (No se toma en cuenta el rendimiento térmico de un motor, el mismo depende de la relación de compresión y la suma de las pérdidas debidas a la combustión y las fugas).
El resto de la energía generada por el combustible, vale decir, casi dos tercios, se elimina del motor a través de los gases de escape, de la radiación y por el sistema de refrigeración. Es por esta razón que el sistema de refrigeración toma tanta importancia para la vida útil de un motor, ya que es el responsable de retirar casi un tercio del calor generado en la cámara de combustión.
Aditivo refrigerante, anticongelante y anticorrosivo Tipo A, basado en Tecnología de Ácidos Orgánicos (OAT) para Motores Diesel y Nafteros.
Características:
Normativa:
El Glicial Ecoflú se elabora bajo procedimientos de calidad estandarizados según basados en las siguientes Normas Vigentes: IRAM, IRAM 41368:2008, SAE J 1034 ASTM D 4985 y ASTM D 3306 entre otras normas propietarias de fabricantes de Vehículos. Así mismo, cumple con la resolución 237/2008 de la Secretaría de Comercio Interior.
Recomendaciones:
Uno de los requisitos más importantes para que un motor de combustión interna (nafta, diesel o gas natural) pueda alcanzar los límites de trabajo previstos, se refiere al enfriamiento del motor y más específicamente a mantener la temperatura del mismo en las condiciones de diseño en forma constante en el tiempo.
Para tener una idea completa acerca de la importancia de mantener la temperatura del motor dentro de sus límites establecidos, debemos recordar que, por ejemplo, en un motor diesel solamente entre el 35 % y el 40% de la energía producida por el combustible se transforma en potencia. (No se toma en cuenta el rendimiento térmico de un motor, el mismo depende de la relación de compresión y la suma de las pérdidas debidas a la combustión y las fugas).
El resto de la energía generada por el combustible, vale decir, casi dos tercios, se elimina del motor a través de los gases de escape, de la radiación y por el sistema de refrigeración. Es por esta razón que el sistema de refrigeración toma tanta importancia para la vida útil de un motor, ya que es el responsable de retirar casi un tercio del calor generado en la cámara de combustión.
De lo anterior, se deduce que, si se presentan fallas en el sistema de refrigeración probablemente se producirán incrementos de temperatura considerables en el interior del motor, lo que podría causar severos daños irreversibles. No todos los aditivos anticongelantes y refrigerantes existentes en el mercado actual previenen como debieran contra los riesgos de congelación o ebullición. Sólo aquellos que cumplen con las normas IRAM y la resolución 237/2008 de la Secretaría de Comercio Interior que regula y normaliza la Lealtad Comercial en la comercialización de los aditivos anticongelantes y refrigerantes, pueden garantizar una protección adecuada.